¿Qué es el Bruxismo? Síntomas, Consejos y Tratamientos
¿Qué es el bruxismo?
El bruxismo es un hábito involuntario en el que muchas personas «rechinan» los dientes sin ningún propósito funcional. Las personas bruxistas apretan de forma continuada los dientes, llegando a sufrir roturas de dientes y molestias en la articulación que une la mandíbula con el cráneo. Las molestias en esta articulación, conocida como ATM (articulación temporomandibular) irradian por proximidad a tres zonas muy sensibles: oído, cervicales y cabeza
El bruxismo puede ser diurno y está relacionado directamente con la tensión, el estrés y la mala oclusión, siendo conscientes de ello es posible llegar a controlarlo. El más complejo es el bruxismo nocturno, siendo el principal motivo el estrés y la tensión acumulados durante la jornada, manifestándose el mismo durante el sueño de forma totalmente inconsciente y ajena a nuestra voluntad.
Síntomas
- Problemas cervicales. La contractura de la musculatura mandibular puede provocar una contractura en la musculatura cervical.
Dolor de cabeza, los músculos de la cabeza pueden llegar a contraerse como consecuencia de la tensión que sufren los músculos mandibulares.
Dolor y molestias en la mandíbula, existen pacientes que explican dichas molestias como algo parecido a las agujetas.
Crepitaciones o ruidos en la articulación temporomandibular.
Las estructuras de la articulación temporomandibular están muy cerca del tímpano, por lo que su contractura a veces puede parecer un dolor de oídos.
Tratamientos
Los objetivos son evitar que los dientes contacten entre si y relajar la mandíbula. Contamos con varias técnicas y procedimientos disponibles.
La Férula de descarga es una buena opción puesto que la hacemos con un molde de los dientes a medida para “topar” la mordida. Estas, al ser ligeras, facilitan una rápida adaptación. Las férulas también pueden ser rígidas o semirígidas, estas últimas tienen una almohadilla en el interior de la férula. La elección dependerá la oclusión del paciente y del tipo de mordida.
Practicar técnicas de relajación es una muy buena forma de reducir el estrés y la tensión acumulados durante del día, este hecho favorece el descanso y el “apretamiento”. La tensión acumulada favorece la contracción muscular, hacer estiramientos dirigidos mejora el bienestar general y limita los efectos del bruxismo. Es recomendable hablar antes con un fisioterapeuta.
También podemos hacer uso del tratamiento de ortodoncia, este tiene como objetivo alinear la mordida, que consigue reducir el apretamiento repartiendo las cargas, con uno resultado muy efectivo. El más novedoso, es la aplicación de toxina botulínica, este producto actúa relajando los músculos masticatorios reduciendo su potencia. Esta disminución de la presión al dormir evita en gran medida los dolores de ATM, cabeza, cervicales y oídos y preserva la integridad de las piezas dentales. Es muy fácil de aplicar en el musculo masetero, sin dolor, de forma rápida y sencilla, apreciándose el efecto a las 48 horas, la relajación óptima se consigue a la semana, en ese momento es conveniente hacer una revisión de control.